Como cada año en estas fechas,
Fantasilandia abrió sus puertas para miles de niños del Hogar de Cristo, inaugurando una o varias novedades. Después de dos años de ausencia, el parque de atracciones chileno
ha inaugurado el "nuevo Tagadá" (atracción clásica de los años 80), llegado desde Italia.
Además, se abrieron al público tres nuevas atracciones infantiles: “Happy Swing”, un columpio mecánico de colores, “Samba Ballon”, una serie de tazas voladoras giratorias y una versión infantil del xtreme fall: una torre de 10 metros de caída libre, creado especialmente para menores.